México dio un paso histórico. Nunca antes en el país se había avanzado tanto en un proyecto legislativo enfocado en la regularización de la mariguana (cannabis), lo cual se logró con la aprobación en la Cámara de Diputados del dictamen para la creación de la Ley Federal para la Regulación del Cannabis.

El documento, el cual aún tiene un largo camino por recorrer antes de entrar en vigor, no es irreprochable, sin embargo, todavía es perfectible y brinda un nuevo enfoque al consumo y posesión de esta planta, al igual que abre un sinfín de oportunidades en materia económica.
Para Lisa Sánchez, directora general de México Unido Contra la Delincuencia, lo sucedido el día miércoles en San Lázaro, sin duda es un punto de inflexión para el país, no obstante, comenta que hay una serie de temas que deben afinarse antes de calificar la legislación como exitosa.
Explica que pese a que este dictamen legaliza la mariguana para ciertas actividades productivas, de fondo no lo hace para su consumo y posesión.
“Podríamos decir que la ley ahora tolera estas actividades, ya que mantiene el sistema de cantidades permitidas, por lo que dependiendo de la porción que se tenga, hay distintas sanciones, ya sean multas administrativas o penas de cárcel”.
En cuanto a la producción y comercialización de esta planta, principales actividades a las que va enfocado el proyecto, dice que se mantiene la estrategia de la minuta que emitió originalmente la Cámara alta y que “ básicamente elaboró Segob”, por lo que se permitirá el autocultivo, los clubes canábicos y la venta al menudeo a través de empresas privadas a las cuales el gobierno les otorgará licencias para cutivar, transformar, transportar, distribuir y vender cannabis en puntos de venta específicos, y las cuales será responsable de emitir la Comisión Nacional contra las Adicciones (Conadic).